La ración ronda los 60-80g de legumbres en seco y los 150-200g si están hidratadas.
1.- Cuando son secas se deberían ponerse a remojo el doble del tiempo habitual puesto que cuánto más cerca estén de la germinación, mayor disponibilidad de nutrientes tienen. Por ejemplo, las lentejas se pueden poner a remojo 1 día y los garbanzos hasta 3 días.
2.- Hay que desechar el agua del remojo una vez al día.
3.- Una vez hidratadas se pueden congelar para su posterior utilización y así no tener que repetir el proceso
Son una óptima fuente de proteínas y fibra.